El final de cada curso escolar suele ser una época de reflexión para muchos padres, particularmente cuando notan que sus hijos tienen serias dificultades para mantenerse al día con el contenido académico. En estas circunstancias, los gabinetes especializados se vuelven sumamente importantes. Estos lugares proporcionan un entorno donde médicos y terapeutas pueden llevar a cabo evaluaciones detalladas para determinar el origen de las dificultades que enfrenta el niño.
Los padres acuden a estos gabinetes buscando respuestas y soluciones para ayudar a sus hijos a superar las barreras que afectan su rendimiento escolar y, en algunos casos, su bienestar emocional. Los profesionales en estos centros realizan evaluaciones completas que pueden incluir pruebas psicométricas y neuropsicológicas, así como evaluaciones del desarrollo motor y del lenguaje. Este enfoque multidisciplinar permite identificar no solo las dificultades académicas específicas del niño, sino también cualquier problema subyacente que pueda estar influyendo en su situación.
Una vez identificado el origen de las dificultades, los profesionales del gabinete colaboran con los padres y el equipo escolar para diseñar un plan de intervención personalizado que atienda las necesidades específicas del niño. Este plan puede incluir terapias individuales, apoyo educativo adicional, adaptaciones curriculares o recomendaciones para aplicar en el entorno escolar. El objetivo final es proporcionar al niño las herramientas y el apoyo necesarios para superar las dificultades y alcanzar su máximo potencial tanto académico como personal.
Sara Herrero es neuropsicóloga y directora del Gabinete Multidisciplinar de la Fundación Querer.
Siempre que atravesamos un fin de trimestre, aumentan las llamadas a Gabinete. ¿Cuáles son las incertidumbres más habituales entre los padres que llaman?
A estas alturas del curso, las familias suelen acudir a nosotros preocupados por el rendimiento académico de sus hijos cuando no ha sido el esperado o las notas no se corresponden al esfuerzo realizado desde casa. También, nos consultan cuando han pasado todo el curso con dificultades específicas en materias clave como matemáticas o lengua, de cara a trabajarlo durante este verano a través de clases de apoyo. Y, por supuesto, cuando se han detectado desde el aula la presencia de problemas de atención y concentración, o comportamientos disruptivos. Desde el gabinete, damos respuesta a las preocupaciones de las familias y nos ponemos manos a la obra para que el curso siguiente no resulte complicado.
Se termina el curso escolar. Muchos profesores comentarán a los padres que el año académico de su hijo no ha ido bien. ¿Qué motivos puede haber detrás de un rendimiento inadecuado?
Detrás del bajo rendimiento académico puede haber múltiples motivos que debemos analizar para proporcionar las ayudas necesarias y evitar que vuelva a suceder en los siguientes cursos. En ocasiones, nos encontramos con problemas del neurodesarrollo, como el TDAH o las dificultades de aprendizaje, como la dislexia, que dificultan a los niños seguir el ritmo adecuado para obtener un rendimiento con buenas calificaciones. Otras veces, detrás de estas malas notas, podemos encontrar dificultades emocionales como ansiedad o depresión, métodos de enseñanza inadecuados en relación con el perfil cognitivo del niño, o problemas sociales como el acoso escolar. En nuestro gabinete, realizamos evaluaciones exhaustivas para identificar las causas subyacentes y desarrollar un plan de intervención adecuado.
En lo que respecta a fracaso escolar, ¿cuáles son las causas neurológicas más habituales?
Detrás del fracaso escolar, habitualmente se encuentran trastornos del neurodesarrollo, entre los más habituales podemos esperar la presencia Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) o trastornos del aprendizaje como la dislexia o la discalculia. Las manifestaciones clínicas de estos trastornos pueden afectar a diversas áreas del funcionamiento cognitivo y comportamental, dificultando el desempeño académico del niño.
¿Cómo influyen los trastornos neurológicos, como el TDAH, en el rendimiento académico de los estudiantes?
En general, todos los trastornos del neurodesarrollo afectan en el rendimiento de una o más materias escolares. Por ejemplo, los niños con TDAH suelen tener dificultades para mantener la atención, seguir instrucciones y completar tareas. También pueden mostrar impulsividad y movimiento en exceso (hiperactividad) que interfieren con su aprendizaje y el de sus compañeros. Estos desafíos pueden llevar a un bajo rendimiento académico y a problemas de comportamiento en el aula.
¿De qué manera pueden los maestros identificar señales tempranas de trastornos neurológicos que podrían conducir al fracaso escolar?
A través de la observación Los maestros pueden identificar señales tempranas de trastornos neurológicos detectando cambios en el comportamiento, dificultades persistentes en la atención y concentración, problemas en la organización y finalización de tareas, y dificultades en el aprendizaje de habilidades académicas básicas. Esta observación junto con la comunicación con los padres son cruciales para la identificación temprana. En nuestro gabinete, proporcionamos formación y recursos a los maestros para ayudarles a reconocer estas señales y poder trabajar sobre las dificultades lo antes posible.
¿Qué papel juegan los programas de intervención temprana en la prevención del fracaso escolar entre niños con trastornos neurológicos?
Los programas de intervención temprana son esenciales para prevenir el fracaso escolar. Estos programas proporcionan apoyo especializado desde una edad temprana, ayudando a los niños a desarrollar las habilidades necesarias para superar sus dificultades. Intervenciones como la terapia conductual, el apoyo académico individualizado y las técnicas de aprendizaje adaptadas pueden mejorar significativamente el rendimiento académico y el bienestar emocional de los niños con trastornos neurológicos. En nuestro gabinete, diseñamos programas de intervención basados en una evaluación integral de cada niño.
¿Qué tipo de evaluaciones neuropsicológicas son útiles para entender las dificultades académicas en estudiantes y cómo pueden informar el plan de estudios?
Las evaluaciones neuropsicológicas incluyen pruebas que evalúan el funcionamiento cognitivo general, la memoria, la atención, las habilidades de lenguaje, las funciones ejecutivas y las habilidades visoespaciales. Estas evaluaciones nos permiten identificar las fortalezas y debilidades específicas de un estudiante, así como plantear las adaptaciones necesarias en el plan de estudios, de acuerdo a las necesidades detectadas. En nuestro gabinete, utilizamos estos datos para diseñar intervenciones personalizadas que optimizan el aprendizaje y el desarrollo del niño.
¿Qué impacto tiene la falta de diagnóstico o el diagnóstico tardío de trastornos neurológicos en el desempeño escolar de los estudiantes?
Cuando no se establece un diagnóstico o no se detectan a tiempo las dificultades a tiempo, se puede producir el denominado “efecto bola de nueve”, ya que además de haber un impacto directo sobre el rendimiento académino, los niños pueden experimentar frustración, baja autoestima y desmotivación, que les puede llevar a presentar problemas de comportamiento y, en algunos casos, al abandono escolar. Una evaluación completa en el momento en el que se empiezan a detectar las primeras dificultades nos permitirá implementar las intervenciones adecuadas que pueden mejorar el rendimiento académico y el bienestar general del niño.
¿De qué manera la comorbilidad de trastornos neurológicos y emocionales, como la ansiedad o la depresión, exacerba el riesgo de fracaso escolar?
La comorbilidad de trastornos neurológicos y emocionales puede aumentar significativamente el riesgo de fracaso escolar. La presencia simultánea de problemas como el TDAH y la ansiedad, o la dislexia y la depresión, puede complicar el manejo de los síntomas y aumentar las dificultades académicas. Sin embargo, se sabe que la detección a tiempo, una intervención y un contexto adecuado influyen muy positivamente sobre la evolución y pronóstico de las dificultades.
¿Qué papel juegan los terapeutas ocupacionales y otros profesionales de apoyo en la mitigación del fracaso escolar en estudiantes con trastornos neurológicos?
Cada profesional que forma parte del equipo multidisciplinar tiene su papel, siendo de gran importancia la coordinación entre todos ellos, con la familia y con el centro escolar, para lograr los mejores resultados. El gabinete de l a Fundación Querer cuenta con terapeutas ocupacionales, fisioterapeuta, psicólogos, neuropsicólogos, logopedas y terapeuta del lenguaje intérprete de lengua de signos trabajando de manera coordinada para incidir cada uno sobre el área de desarrollo específica de cada niño.