La educación emocional infantil enseña a los niños a controlar y a gestionar sus emociones. Cuando trabajas las emociones en clase consigues que tus alumnos estén más motivados y les ayudas positivamente en su desarrollo intelectual.
La educación y el aprendizaje de los niños es una de las principales preocupaciones de los padres y también de los maestros. Es importante que los alumnos vayan adquiriendo conocimientos académicos, sin dejar de lado otros tipos de aprendizajes como es la gestión de sus sentimientos. El psicólogo y escritor Daniel Goleman, define la educación emocional como “la capacidad de reconocer nuestros propios sentimientos y los de los demás, de motivarnos y de manejar adecuadamente las relaciones”. Es muy importante que los niños aprendan a identificar y gestionar sus emociones, tal y como explica la psicóloga educativa, Clara Aladrén Bueno, “Los niños tienen que aprender a pensar antes de actuar, a controlar su agresividad y su ira, a identificar por ejemplo cuando están tristes o contentos… Y todo esto se consigue educándolos emocionalmente desde pequeños. Solamente así serán más felices y sabrán adaptarse a las diferentes situaciones por las que les irá llevando la vida”.
Además, el portal de Educación Infantil y Primaria, Educapeques, señala que la educación emocional es importante para el niño porque:
Serán alumnos cognitivamente más eficaces, tendrán más concentración y menores interferencias afectivas.
Supondrá un ingrediente relevante en su éxito personal y profesional.
Aumentará su motivación, su curiosidad y las ganas de aprender.
Amplía la agudeza y profundidad de la percepción e intuición.
Los niños serán emocionalmente más felices.
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Por esto mismo en esta ocasión compartimos con vosotros un material para reconocer emociones por medio del lenguaje corporal. Imprescindible, os va a encantar.
Lo podéis encontrar y descargar aquí