La terapia ocupacional es una disciplina clave en la atención a alumnos con Necesidades Educativas Especiales (NNEE). Se centra en ayudar a niños y adolescentes a desarrollar habilidades que les permitan realizar actividades cotidianas con mayor autonomía y mejorar su participación en el entorno escolar, familiar y social. En el contexto educativo, los terapeutas ocupacionales desempeñan un papel crucial al trabajar junto a otros profesionales, como logopedas, psicólogos y maestros, para diseñar estrategias que faciliten el aprendizaje y el desarrollo de habilidades fundamentales para la vida.

La terapia ocupacional se centra en la promoción de la salud y el bienestar a través de la ocupación, que comprende todas aquellas actividades significativas para la persona en su vida diaria. En el caso de los alumnos con NNEE, esto incluye tareas tan variadas como escribir, cortar con tijeras, vestirse, alimentarse, participar en actividades deportivas, y comunicarse de manera efectiva con los demás.

Para estos alumnos, la terapia ocupacional es fundamental para:

  • Desarrollar Habilidades Motoras Finas y Gruesas: La terapia ocupacional ayuda a mejorar la coordinación y el control motor, esenciales para actividades como escribir, dibujar o manipular objetos pequeños. También trabaja en habilidades motoras gruesas, como correr, saltar y mantener el equilibrio, que son importantes para la participación plena en el entorno escolar.
  • Mejorar las Habilidades de Autocuidado: Los terapeutas ocupacionales trabajan con los alumnos para desarrollar habilidades que les permitan realizar actividades de autocuidado, como vestirse, asearse y comer de manera independiente. Esto es especialmente importante para aquellos con discapacidades físicas o cognitivas que dificultan la realización de estas tareas de manera autónoma.

 

  • Facilitar la Integración Sensorial: Muchos alumnos con NNEE, como aquellos con Trastorno del Espectro Autista (TEA), tienen dificultades con el procesamiento sensorial. La terapia ocupacional ayuda a estos alumnos a manejar mejor las respuestas sensoriales a los estímulos en su entorno, lo que puede mejorar su concentración y comportamiento en el aula.

  • Fomentar Habilidades Sociales y de Juego: Los terapeutas ocupacionales también se enfocan en desarrollar habilidades sociales y de juego, que son esenciales para el desarrollo emocional y social. A través de actividades diseñadas específicamente, los alumnos aprenden a interactuar con sus compañeros, compartir, turnarse y comunicarse de manera efectiva

El terapeuta ocupacional en el entorno escolar

En el entorno escolar, los terapeutas ocupacionales colaboran estrechamente con maestros y otros profesionales para adaptar el currículo y el ambiente de aprendizaje a las necesidades de cada alumno. Esto puede incluir la modificación del mobiliario del aula, la creación de horarios personalizados que incluyan descansos sensoriales, o la implementación de herramientas tecnológicas que faciliten el acceso al aprendizaje.

“Cada alumno con NNEE es único, y nuestro trabajo consiste en identificar sus necesidades específicas y diseñar estrategias que les permitan participar plenamente en todas las actividades escolares,” explican desde el Gabinete Multidisciplinar de la Fundación Querer. “A veces, algo tan simple como adaptar el tamaño de un lápiz o cambiar la posición del asiento puede marcar una gran diferencia en el rendimiento del alumno».

Terapia Ocupacional en Fundación Querer

El Gabinete Multidisciplinar de la Fundación Querer cuenta con un amplio equipo de terapeutas ocupacionales altamente capacitados que trabajan de manera integral con otros especialistas, como logopedas, neuropsicólogos y fisioterapeutas, para ofrecer una atención personalizada a cada alumno con NNEE. Este enfoque multidisciplinar es esencial para abordar de manera efectiva las diversas necesidades de estos alumnos y garantizar que reciban el apoyo necesario para su desarrollo integral.

“En la Fundación Querer, creemos en un enfoque integral que aborde no solo las necesidades académicas de los alumnos, sino también sus necesidades físicas, emocionales y sociales,” afirma José Luis Puche, director de la Fundación. “Nuestros terapeutas ocupacionales son una parte fundamental de este enfoque, ya que trabajan para mejorar la autonomía y la calidad de vida de cada alumno.”

El impacto de la terapia ocupacional en la educación de alumnos con NNEE es profundo y multifacético. No solo mejora las habilidades funcionales de los alumnos, sino que también aumenta su autoestima, facilita su integración en el entorno escolar y social, y les proporciona herramientas para enfrentar los desafíos de la vida diaria.

“Ver a un niño lograr algo por sí mismo por primera vez, como abrocharse los zapatos o escribir su nombre, es increíblemente gratificante,” comparten desde la Fundación Querer. “Son esos momentos los que demuestran la importancia de nuestro trabajo y el impacto positivo que podemos tener en la vida de estos niños y sus familias.”