Waves Socks, proyecto solidario de la Fundación Querer, ha sido galardonado en la XII Edición de los Premios Nacionales El Suplemento, durante una gala celebrada el pasado viernes en el Hotel The Westin Palace de Madrid.
En concreto, Waves Socks recibió el premio en la categoría ‘Solidaridad’ por su labor social durante la campaña por el mes de las enfermedades raras. «Este reconocimiento es un impulso para seguir adelante con nuestra labor y demostrar que, con esfuerzo y dedicación, las personas con discapacidad pueden alcanzar grandes logros y contribuir positivamente a la sociedad», aseguró Eva Revuelta, directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de la Fundación Querer, quien también destacó que el proyecto «no solo ha sido una oportunidad para que nuestros estudiantes demuestren su talento, sino que también ha tenido un impacto positivo en la sociedad».
Los Premios Nacionales El Suplemento son una destacada distinción creada con el objetivo de reconocer y celebrar el talento y la excelencia en diferentes ámbitos empresariales. La gala reunió a 30 personalidades y empresas que fueron reconocidas por su contribución y logros en la industria, la tecnología, el deporte y las artes.
Waves Socks, un proyecto solidario por el futuro de niños con trastornos neurológicos
Waves Socks nace en 2021 como parte de las iniciativas diseñadas para dar visibilidad a la Fundación Querer. Este proyecto solidario utiliza una marca de calcetines como vehículo para potenciar la creatividad, autonomía e inclusión laboral de niños con trastornos neurológicos de ‘El Cole de Celia y Pepe’, colegio de educación especial de la fundación. Además, los fondos recaudados con la venta de estos calcetines se destinan a proyectos solidarios que ayudan a mejorar la vida de personas con discapacidad.
Todos los calcetines están diseñados por los niños de este colegio y confeccionados totalmente en España. El proyecto apuesta y apoya el cuidado a nuestro planeta, por lo que están fabricados con los mejores materiales, con total respeto al medio ambiente y el fomento de una cadena de suministro justa y transparente.
Pero, sobre todo, estos calcetines son un imprescindible y un vehículo para concienciar, sensibilizar y movilizar a la sociedad sobre la existencia de las enfermedades raras, su impacto en las familias, la dificultad para obtener un diagnóstico, la inexistencia de cura en muchas de ellas, la importancia de la investigación científica y, por último, la posibilidad de que cualquiera las pueda vivir.