El lenguaje es uno de los aprendizajes imprescindibles que deben desarrollar todos los niños, ya que gracias a él podemos comprender y representar las diferentes situaciones que experimentamos, comunicarnos con otros o regular las emociones o el comportamiento.
El lenguaje es un sistema de comunicación con una estructura, está formando por determinados componentes, los cuales deben encajar los unos con los otros para que la comunicación con la otra persona a través del lenguaje sea fructífera. Los componentes del lenguaje son la forma, el contenido y el uso, y es fundamental realizar una evaluación con pruebas determinadas que puedan dar respuestas sobre el desempeño del niño en cada uno de estos componentes.
La evaluación del lenguaje es fundamental, en primer lugar, porque va a reflejar las diferentes necesidades que presenta un niño y si necesita o no una posible intervención. Y, en segundo lugar, a nivel académico, ya sirve como herramienta para guiar a los docentes hacia el desarrollo y la puesta en marcha de diferentes ayudas, estrategias y adaptaciones con el fin de ofrecer al alumno facilidades en las áreas comunicativa y del lenguaje.
Cada paciente que acude a evaluarse es distinto, por lo que toda evaluación tiene un riguroso proceso. En primer lugar, se lleva a cabo una entrevista con la familia en la que se detalla el motivo de consulta, así como las necesidades y dificultades que observar en el ámbito lingüístico en su hijo en el día a día. Posteriormente, se realiza una observación al niño con el fin de conocer sus conductas, su actitud frente a una nueva situación y su nivel general de lenguaje y comunicación. Por último, gracias a la información recogida tanto por parte de los padres como del propio niño, el logopeda es el encargado de elegir las diferentes pruebas a nivel de habla y lenguaje que debe realizarle al niño.
Es importante destacar, especialmente en edades tempranas, la importancia de actuar a tiempo. Una evaluación en el momento preciso es fundamental para detectar las necesidades que pueda llegar a presentar un niño e iniciar una intervención lo antes posible.
Luis Rojas Céspedes
Logopeda Fundación Querer