Me siento feliz y orgullosa de llevar celebrando cuatro años cada 21 de marzo de que «mi bombón» Rodrigo haya nacido con un cromosoma adicional. Aunque lo celebro a diario si que este día, nos da a todas las mamás y papás la oportunidad de educar y sembrar conciencia acerca de las personas con Síndrome de Down como seres humanos con habilidades únicas que lo identifican.
Ser madre de Rodrigo no es ningún reto, lo quiero como puedo querer a Alonso. No necesito excepciones, sino adaptaciones, aceptación y el respeto que todos nos merecemos por igual.
Si es cierto que Rodrigo necesita una «guía» para que le impulse a cómo se deben de hacer las cosas, (en otras muchas tiene una iniciativa que me deja asombrada) pero solo es eso, un empujón porque el resto ya sabe cual es su camino.
Su objetivo diario es mostrarnos y enseñarnos a descubrir la verdadera «capacidad» porque realmente es así, cada día me demuestra su autonomía en cada una de las tareas que se presentan en casa, sea vestirse, lavarse la carita, lavarse los dientes, comer solo, ir a la cocina coger su vaso preferido y echarse agua de la botella, coger el mando de la tele, encenderla y poner el canal de los dibujos animados…o fuera de ella, comprar el pan, ir al supermercado y coger una cesta para la compra, dar los buenos días, dar las gracias, pararse ante un paso de cebra….y así mil tareas más, es decir acciones que hacemos a diario de manera natural para nosotros es algo normal, pero para él son pura celebración porque de lo que se trata es que vaya afianzando conocimientos, habilidades, tareas para que crezca creyendo en sus propias capacidades y en un futuro sea lo más autónomo y autosuficiente de su propia vida.
Gracias a este gran mundo tengo la oportunidad de aportar mi granito de arena y que se nos oiga a todos los papás, mamás que se encuentran en mi misma situación. He conocido a personas fantásticas que me han abierto sus puertas para dejarme contar mi experiencia personal.
Soy Loreto, mamá de Rodrigo. Desde su nacimiento han crecido mis ganas de aprender y crear.
Gracias a él nace mi nube celeste, un blog personal creado para compartir muchas cosas que me gustan: me apasiona la decoración, la cocina, las manualidades, el DIY y descubrir lugares y sitios para compartir con los peques en mi ciudad, Granada.
¿Me acompañáis?